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La mejor manera de portear a un bebé

Si eres madre, o vas a serlo dentro de muy poco, seguramente te hayas planteado en más de una ocasión cual es la mejor manera de portear a un bebé recién nacido o que beneficios tiene el porteo para el bebé

Seguramente has notado que en los últimos años el porteo se vuelto una práctica muy popular entre muchas madres y padres. Ello se debe en gran medida a que ayuda a construir un vínculo más fuerte entre la madre y su bebé.

De hecho, los expertos aseguran que el porteo reduce considerablemente el riesgo de que la madre sufra depresión posparto y ayuda a los bebés a crecer más inteligentes y felices.

De hecho los bebés que son porteados por su madre o padre lloran menos que los que no lo son. La razón principal es que la vertical que mantiene el bebé relaja su abdomen reduciendo el riesgo de sufrir los habituales cólicos tan temidos por los padres.

Además, durante el porteo el bebé adopta una posición más natural, similar a la del feto dentro del útero materno antes del nacimiento.

Todo ello ayuda a que, al sentirse más seguro, relajado y cómodo no sienta la necesidad de llorar permaneciendo en un estado de alerta frente a su entorno que favorece su desarrollo mental y social.

Si has tomado la decisión de adoptar esta práctica tan beneficiosa para tu bebé, dado que en el mercado encontrarás diferentes sistemas portabebés, es muy importante que tengas en cuenta una serie de recomendaciones para escoger la mejor mochila portabebés o el fular portabebés más adecuado para ti y tu bebé.

Aspectos a tener a la hora de portear a un bebé

El peso del bebé

Algunos padres prefieren optar por el uso de un fular elástico para portear a su bebé en los primeros meses y comprar una mochila portabebés ergonómica después cuando el niño alcance un peso de 15 o 20 kilos.

Comodidad para el porteador.

Si por ejemplo, optas por usar un fular portabebés es muy importante que este fular esté confeccionado con un tejido resistente y que se ajuste perfectamente quedando el bebé bien pegado al cuerpo y comprobar que si realizamos un movimiento brusco o nos agachamos, el bebé no se despega del cuerpo del porteador.

Si se trata de una mochila portabebés, esta debe tener unas correas anchas y fuertes y un diseño ergonómico que distribuiya el peso del bebé de manera uniforme y evite que los hombros, el cuello y la parte superior de la espalda se tensen.

Si vas a compartir el transportador con otro padre o cuidador, asegúrate de que sea fácilmente ajustable. Muchos portadores estructurados vienen en tamaños regulares y extra grandes para padres altos o más grandes.

Fácil de usar

Asegúrate de que resulta fácil colocar y sacar al bebé sin ayuda. Si se trata de una mochila portabebés de desabrocharse fácilmente para que pueda llevar a su bebé dormido a una cuna o a su carrito sin que se despierte.

Debe facilitar la lactancia

Si está amamantando con leche materna a su bebé será más fácil darle el pecho si opta por un fular elástico para portear a su bebé.

Otras recomendaciones

Mientras portea su bebé, especialmente si utilizas un fular, comprueba a menudo de que mantiene una postura ergonómica en todo momento.

Asegúrate también de que no esté en una posición demasiado curvada y verifica que la cara del bebé no está oprimida por la tela o contra ti. Estas dos situaciones pueden llegar a ser muy peligrosas para tu bebé.

Debes poder ver la cara o los ojos de tu bebé en todo momento. A menos que le estés amamantando, la cara de tu bebé debe estar tapada.

En definitiva, independientemente del método que elijas, portear a tu bebé es una practica segura y recomendable para la madre y el niño ya que aporta beneficios a ambos.

Siempre y cuando tengas en cuenta que lo primordial es la seguridad, puedes mantener esta práctica mientras sea cómoda y segura para ti y tu bebé.

Se trata de una experiencia única y por ello se ha convertido en una práctica tan popular entre los padres de todo el mundo.