fbpx

Alimentación para controlar la enfermedad de hashimoto

66 / 100

La enfermedad o tiroiditis de Hashimoto es una enfermedad autoinmune muy frecuente en mujeres de mediana edad y cuya incidencia ha aumentado de manera notable en los últimos años debido a factores como el estrés y cambios en el estilo de vida.

Dado que la dieta y la alimentación desempeñan un papel fundamental en el tratamiento del hipotiroidismo asociado a la enfermedad de Hashimoto en este artículo vamos compartir una serie de pautas saludables de alimentación para controlar la denominada tiroiditis de Hashimoto.

Si bien, los consejos que compartiremos a continuación pueden servirte de ayuda, te recomendamos acudir a un dietista.  Afortunadamente, hoy en día es fácil acceder a profesionales que prestan sus servicios de dietética online, sin la necesidad de desplazarnos y a un precio asequible. 

Nadie mejor que un profesional de la salud experto en nutrición, alimentación y dietética va ayudarte en el manejo del hipotiroidismo o enfermedad de Hashimoto.

¿Qué es la enfermedad de Hashimoto, síntomas y cómo se diagnostica?

También conocida como hipotiroidismo o tiroiditis de Hashimoto, se trata de una enfermedad autoinmune que se caracteriza por la destrucción del tiroides, una glándula que está situada en la parte anterior del cuello y cuya función es primordial para nuestro organismo, ya que es la encargada de segregar la tiroxina, una hormona que regula, entre otros  el sistema cardiovascular, el ritmo circadiano de sueño-vigilia, el apetito, la función metabólica…

Por lo tanto, si la tiroides no funciona estos sistemas tampoco funcionarán con normalidad. De ahí la importancia de llevar una dieta adecuada para mejorar la función tiroidea.

El nombre de esta enfermedad proviene del médico japonés Hakaru Hashimoto, el cual la describió por primera vez en 1912 como un «bocio linfomatoso».

Como ya hemos mencionado, al igual que ocurre con el resto de enfermedades autoinmunes, es el propio organismo el que ataca a las células de la glándula tiroides al reconocerla como extraña, siendo la principal causa de  hipotiroidismo. Por ello, también se la conoce como tiroiditis autoinmunitaria.

Aproximadamente, de cada diez casos diagnosticados, nueve corresponden a mujeres y solo uno de ellos a hombres. Afecta sobre todo a mujeres de mediana edad y se ha relacionado con la menopausia.

Habitualmente se diagnostica mediante una exploración física, palpando la tiroides, en la que se observa un aumento de su tamaño o un posible cambio de su consistencia, entre otros signos. 

Al compartir algunos síntomas con la menopausia, a menudo se confunden, siendo los principales el aumento de peso, la caída del cabello o una piel seca, entre otros.

Pese a que no podemos actuar sobre los factores hereditarios y genéticos que influyen el hipotiroidismo si podemos adoptar una serie de medidas para controlar la enfermedad como seguir una dieta adecuada. 

Mediante la adopción de sencillas pautas de alimentación saludables como el incremento del consumo de alimentos que aportan nutrientes esenciales que mejoran la función tiroidea.

Dieta y alimentación para mejorar el Hipotiroidismo de Hashimoto

La dieta y el estilo de vida juegan un papel fundamental a la hora de controlar esta enfermedad. Por ello, sigue estos consejos:

La importancia de una dieta antiinflamatoria

Dado que la enfermedad de Hashimoto o tiroiditis autoinmune es una enfermedad  inflamatoria, cobra mucha importancia para su control el hecho de seguir una dieta antinflamatoria rica en verduras, hortalizas y frutas de bajo índice glucémico. 

Consume alimentos ricos en ácidos grasos esenciales

Se aconseja el consumo de alimentos ricos en ácidos grasos esenciales como el pescado azul. Por ejemplo, las sardinas, las anchoas, el salmón, el bacalao o los arenques. También frutos secos como las nueces o frutas como el aguacate.

Evita los alimentos procesados y apuesta por alimentos de producción ecológica

También, es recomendable evitar los alimentos ultraprocesados y optar, en la medida de lo posible, por comprar productos como frutas y verduras de producción ecológica, libres de tóxicos y alimentos libres de grasas trans. 

Una dieta sin gluten puede ser de ayuda

Del mismo modo, se aconseja una dieta libre de gluten o reducir el consumo de gluten. elegir cereales como el trigo sarraceno o la quinoa.  Así como evitar la soja ya que dificulta la absorción de yodo.

No comas verduras crucíferas sin cocinarlas antes

Respecto a las verduras crucíferas, alimentos del grupo de la col, como la coliflor, las coles de bruselas, el repollo, el brócoli es muy importante consumirlas siempre cocinadas. Nunca crudas porque contienen fitoquimicos que inhiben la absorción de yodo por el organismo. 

Algunos suplementos recomendados para mejorar tu la salud tiroidea

Existen ciertos suplementos alimenticios que pueden mejorar la calidad de vida de las personas con la enfermedad de Hashimoto. Nos referimos a suplementos adicionales de selenio y zinc, vitaminas del grupo b y vitamina d. Estas vitaminas y minerales intervienen en la síntesis y  facilitan la función de hormonas tiroideas.

Antioxidantes como la quercitina, la vitamina C y la E también ayudan al reequilibro gastrointestinal. 

Otros suplementos que ayudan a restituir o recuperar la función de barrera de barrera intestinal son la glutamina o la taurina.

Recurre a los beneficios de la micoterapia

La Micoterapia o  uso terapéutico de los hongos y setas que ayudan a nuestro organismo a defenderse mejor de virus o bacterias.

Haz ejercicio físico con regularidad

Junto a la dieta, llevar un modo de vida activo en el que se practique actividad física de forma regular también será de gran ayuda.

Reduce el estrés

Se ha observado como una mejor gestión del estrés mediante herramientas como el yoga o la meditación ayuda en el tratamiento y el control de enfermedades autoinmunes como la de Hashimoto.

Como ves se trata de una serie de hábitos saludables sencillos de implementar desde ya en tu día a día y que te pueden ser de gran utilidad para controlar mejor la enfermedad de Hashimoto.