Las carillas dentales son uno de los tratamientos de odontología conservadora más utilizado tanto para cambiar la estética de los dientes como para restaurar piezas dentales fracturadas o dañadas.
Para conocer más sobre esta solución hemos consultado al equipo de Mirave, una clínica de estética dental en Barcelona con amplia experiencia en este y otros tratamientos de estética dental
Si estás pensando en colocarte carillas dentales pero no sabes qué tipos hay, cuánto duran o como es proceso, te animamos a seguir leyendo porque vamos a esclarecer estas y otras dudas habituales.
Índice
Carillas dentales: ¿Qué son y cuánto cuestan?
Las caries dentales son una pequeñas láminas de porcelana, esmalte sintético, resina u otros materiales de última generación altamente resistentes que se usan para modificar el color, la anatomía, textura, forma y contorno de tus dientes.
Dado que se trata de un procedimiento relativamente sencillo y que la gran mayoría de los pacientes son candidatos para la aplicación de carillas, estas se han popularizado mucho en los últimos años pudiendo escoger hoy día entre diferentes materiales y grosores.
A modo de resumen podemos decir que las funciones u objetivos de las carillas dentales son:
- Cambiar la tonalidad o el color de tu dentadura
- Modificar la forma de tus dientes
- Cambiar la textura de tus dientes
- Alterar ligeramente la posición de los dientes
¿Qué tipos de carillas dentales hay?
Hoy en día podemos encontrar carillas fabricadas siguiendo distintos procedimientos y empleando materiales que van desde porcelana hasta el composite.
Si bien, dentro del mismo material, existen distintos grosores llegando incluso hasta fabricarse piezas ultra-finas de solo 0,3mm de grosor como las carillas Lumineers. elaboradas con porcelana de nueva generación Cerinate.
Si bien, las carillas de porcelana son las que como norma general ofrecen tanto en términos de durabilidad como desde un punto de vista estético.
¿Cómo se ponen las carillas en los dientes?
Lo habitual es que las carillas se coloquen en los dientes anteriores, es decir en los dientes que se muestran cuando nos reímos. Estos son los premolares, los caninos, los laterales y los centrales.
El primer paso será diseñar la sonrisa deseada. Algo que debe ser fruto de un diálogo fluído entre paciente y odontólogo.
Posteriormente se toman unos moldes para hacernos una idea lo más real posible de cómo quedarán los dientes tras el tratamiento.
Una vez tenemos los moldes y decidido el tipo de carrillas a colocar, es necesario preparar adecuadamente al diente.
Esta preparación dental dependerá de varios factores como el material que vayamos a utilizar (cerámica, composite, etc.) o la necesidad del espacio que hay que dejar esa futura carilla el cual varía en función de la coloración, la forma y disposición del diente…
Para recibir las carillas y proporcionarle el espacio necesario, se realiza un tallado del diente que será menor o mayor en función de la posición de los dientes. El objetivo debe ser siempre dañar lo mínimo posible al diente natural.
El paso final será el cementado de carillas. Es decir, la adhesión al diente.
Principales contraindicaciones de las carillas dentales
Como en todo tratamiento existen algunos casos en los que se desaconseja la colocación de carillas dentales como en el caso de pacientes con mordida profunda u otras alteraciones que requieren primero de un tratamiento de ortodoncia o brackets.
Tampoco en el caso de dentaduras con varias piezas dentales rotas o muy dañados, dientes muy pigmentados o extremadamente sensibles. Así como en pacientes con bruxismo,
Si bien, cada caso particular requiere de un diagnóstico y estudio individualizado. Por ello, no lo dudes y consulta a tu odontólogo. Nadie mejor que él resolverá posibles dudas.