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Zapatos ortopédicos para personas con problemas en los pies

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Si sientes molestias al caminar, dolor o notas tus pies inflamados, el uso de zapatos ortopédicos puede ayudarte a aliviar y proteger tus pies evitando que los dedos se deformen y se genere algún tipo de inflamación.

Por ello, este tipo de zapatos son la solución a problemas habituales en los pies como deformidades (pie plano, cavo, talo…), fascitis plantar o el espolón calcáneo pero también su uso es recomendable para personas que trabajan muchas horas de pie.

¿Qué son y qué diferencia a un zapato ortopédico?

Cuántas personas sufren dolores en sus articulaciones como las rodillas y toman medicamentos,  tienden dolores de espalda y utilizan faja, tienen callos en sus pies y deformidades en sus pies pero no se dan cuenta que el uso de un calzado inadecuado puede dejar secuelas graves en nuestra salud.

Los zapatos ortopédicos están pensados específicamente para ofrecer una solución a estos problemas.

Olvida de una vez por todas la idea equivocada de que por ser “ortopédico” el zapato va a ser pesado, incómodo, y sobre todo, antiestético o “feo”. 

Afortunadamente hoy en día podemos encontrar especialmente marcas que fabrican todo tipo de zapatos ortopédicos para mujer, desde calzado deportivo hasta botines y sandalias, diseñados para mujeres con problemas en los pies que no quieren renunciar a lucir un zapato bonito a la par que cómodo.

Por supuesto, también zapatos para hombres concebidos para proteger la salud de nuestros pies.

Gracias a su diseño anatómico los zapatos ortopédicos nos ayudan a fomentar una buena postura y aliviar problemas de salud como el dolor de espalda ya que corrigen la forma de una pisada inadecuada.

Qué características debe tener un buen zapato ortopédico: 

  • Ancho especial. Los zapatos deben proporcionar un buen soporte y contar con suela antideslizante que asegure una buena estabilidad y seguridad al caminar.
  • Capacidad para plantillas ortopédicas. El zapato debe incorporar una plantilla anatómica extraíble que pueda ser reemplazada o sustituida por otra cuando sea necesario.
  • Ajuste perfecto. A menudo, estos zapatos cuenta con una cremallera en el lateral para ayudar al usuario a ajustar perfectamente el zapato y evitar así la necesidad de agacharse cada vez que sea necesario para atarse los cordones.
  • Fabricados en piel y materiales flexibles que se adapten a la forma del pie sin oprimirlo. Además, lo ideal es que en su confección se emplee un tejido impermeable que aísle bien nuestro pie del frío y la humedad en días lluviosos o en los meses fríos del año.

En qué casos es recomendable el uso zapatos ortopédicos

El uso de zapatos ortopédicos es una excelente forma de aliviar, tratar y corregir las posibles deformaciones o deficiencias que se presente en uno o ambos pies como: problemas de pie plano o cavo, fascitis plantar o espolón calcáneo, entre otros problemas de pies.

También para aquellas personas que padecen de diabetes para prevenir el denominado “pie diabético”, una de las complicaciones derivadas de esta enfermedad a la que menos importancia se le presta pero que puede ocasionar, cuando no se usa un calzado adecuado, la aparición de grietas, ampollas incluso úlceras en los pies de una persona diabética. 

Al mejorar la circulación sanguínea, los zapatos ortopédicos previenen la aparición de estas úlceras en los pies.  

Del mismo modo, si trabajas todo el día de pie o gran parte de él, el uso de zapatos ortopédicos te ayudará a aliviar problemas comunes como dolores articulares o de espalda, lesiones lumbares, etc.

También, ayudan a mejorar la movilidad de adultos mayores, reduciendo el posible riesgo de accidentes o caídas ya que aseguran una mayor estabilidad.

En definitiva, si pasas muchas horas de pie al día, eres una persona diabética o sufres fascitis plantar, pie plano u otros problemas en tus pies el uso de zapatos ortopédicos te proporcionará la comodidad y el confort que necesitas para afrontar tu día a día sin sufrir las molestias o el cansancio que ocasionan, por ejemplo, los zapatos tradicionales.